El representante de la otra compañía de seguros puede parecer amable y servicial, y su petición puede parecer inofensiva. Pero tienen un motivo oculto: conseguir que digas algo que puedan utilizar en tu contra más adelante para reducir o incluso denegar tu reclamación. Puede ser una pregunta sencilla como “¿Cómo te encuentras hoy?” y una respuesta sencilla como “Oh, estoy bien. ¿Y tú?”
Más tarde, la compañía de seguros puede tergiversarlo y decir que les has dicho en una declaración grabada que no tienes tanto dolor. Si no tienes tanto dolor, dirán, no puedes estar tan mal y no mereces todo ese dinero que pides para facturas médicas.
Uno de los juegos de la compañía de seguros es llamarte inmediatamente después de un accidente, mucho antes de que te hayas puesto en contacto con un abogado. Es especialmente importante que no aceptes una declaración grabada en este momento: como dicen los programas de televisión, puede y será utilizada en tu contra ante un tribunal. Pero si has contratado a un abogado, la compañía de seguros no puede discutir los detalles del accidente con la víctima. Deben trabajar a través de tu abogado.
Cuando una compañía de seguros me llama y me pregunta si puede llamarte para una declaración grabada, mi respuesta es sencilla: Llamamos “deposiciones” a las declaraciones grabadas, y les avisaremos cuando estés listo para prestar la tuya.
Abogado de accidentes de tráfico